La Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) se encarga de supervisar que los Estados cumplan con las ordenes de reparación incluidas en sus sentencias. Esto ha sido así desde el primer caso que llegó a su conocimiento: Velásquez Rodríguez vs. Honduras.
Sin embargo, esta competencia de supervisión de cumplimiento no ha estado libre de cuestionamientos, pues la Convención Americana sobre Derechos Humanos (CADH) no la señala de forma expresa.

¿Por qué la Corte IDH puede supervisar que sus sentencias se cumplan?
La CADH, en su artículo 65, indica que la Corte IDH debe someter a consideración de la Asamblea General de la OEA los casos en los cuales un Estado haya incumplido sus decisiones jurisdiccionales. No establece ningún procedimiento para que la propia Corte supervise el cumplimiento de sus sentencias.
No obstante, el artículo 63.1 de la misma Convención establece que:
Cuando decida que hubo violación de un derecho o libertad protegidos en esta Convención, la Corte dispondrá que se garantice al lesionado en el goce de su derecho o libertad conculcados. Dispondrá asimismo, si ello fuera procedente, que se reparen las consecuencias de la medida o situación que ha configurado la vulneración de esos derechos y el pago de una justa indemnización de la parte lesionada (subrayado añadido al texto original).
Tomando en cuenta el texto de ese artículo, la Corte IDH ha interpretado que, una vez que declara la responsabilidad internacional de un Estado, tiene que asegurar "el goce de su derecho o libertad conculcados" y, en ese sentido, supervisar que sus decisiones se cumplan para que el Estado respectivo satisfaga efectivamente su deber de garantía. Si no lo hace, sus sentencias serían ilusorias y se debilitaría la razón de ser de este organismo regional.
En 2003, cuando la competencia de la Corte IDH fue cuestionada por Panamá, dentro del caso Baena Ricardo vs. Panamá, la Corte IDH lo explicó así a través de una sentencia sobre su competencia.
En esa decisión indicó también que, la supervisión del cumplimiento de sentencias es uno de los elementos que componen su función jurisdiccional. Si no fuese así, las decisiones de la Corte IDH respecto a los casos contenciosos no serían efectivas y constituirían meras declaraciones.
La justicia administrada por la Corte únicamente se materializa, en el caso concreto, cuando las reparaciones integrales que ordena se cumplen, por ello las sentencias son efectivas en la medida en la que se ejecutan y los mecanismos de supervisión del cumplimiento son necesarios para garantizar la aplicación del pronunciamiento jurisdiccional.
¿Por qué es importante la etapa de supervisión de sentencias?
La supervisión de cumplimiento de las sentencias de la Corte IDH es vital porque garantiza una protección efectiva de los derechos humanos de las víctimas.
En la misma sentencia sobre su competencia, la Corte IDH explicó que el derecho de acceso a la justicia, previsto en los artículos 8 y 25 de la CADH, está estrechamente relacionado con el cumplimiento de las sentencias y, para satisfacerlo, no basta emitir una decisión definitiva en un proceso judicial. El derecho de acceso a la justicia, en un sentido amplio, también requiere la existencia de mecanismos efectivos para ejecutar esa decisión. De lo contrario, se estaría negando el derecho de acceso a la justicia internacional.
Para recibir explicaciones sencillas como esta todas las semanas, suscríbete gratis al Newsletter Estudio DDHH 1-2-3, solo debes ingresar tus datos aquí.
Comments